Nesty Sánchez: Un micrófono de memorias.

0
97

“Nesty fue pasión, profesionalismo y una cálida voz; el molde de lo que debe ser un buen narrador.”

Emilio Pérez

Esta columna se escribe con el corazón en la mano, con la garganta apretada y con los recuerdos haciendo fila en la memoria. Hoy honramos la carrera y vida de un hombre que con su inigualable voz relató gran parte de la historia deportiva de nuestros pueblos del este: Néstor Juan Sánchez Mendoza, nuestro eterno Nesty Sánchez.

Nacido el 12 de septiembre de 1942, natural del barrio Pasto Viejo de Humacao y también residente del barrio Pitahaya, Nesty vivió el deporte con intensidad desde joven. A los 15 años ya jugaba fútbol en el legendario parque Jacinto Hernández, como parte del club JUMACAO bajo la dirección de otra leyenda que también se graduó celestialmente este año 2025, el eterno maestro, Juan “Saso” Tullier.

A los 17 años, entró a WALO Radio cubriendo las vacaciones de la leyenda radial Rafy Limardo, y desde entonces su vida cambió. Con el tiempo, moderó y produjo con éxito varios programas y eventos deportivos, compartiendo micrófonos con grandes comunicadores de nuestra historia deportiva como Manolo Rodríguez, Luis Andrés Gándara, José Rafael “Palillo” Santiago y Héctor Rafael Vázquez, entre otros, dejando así una huella imborrable en la narración deportiva de Puerto Rico.

Pero la verdadera pasión de “Nesty” fue el deporte del béisbol. En 1963, a los 21 años, fue un destacado lanzador relevista de la Clase A. Y aunque fue un talentoso atleta, su verdadero don lo descubriría en el camino, el arte de la narración.

Durante más de seis décadas, Nesty fue una de las voces más admiradas del deporte.

Su trayectoria en el beisbol Doble A es increíble y casi imposible de igualar; fueron 34 años como la voz oficial de los Grises de Humacao, 12 temporadas con los Azucareros de Yabucoa, 14 con los Artesanos de Las Piedras, y 1 con el pueblo de Ceiba. En muchas de esas transmisiones radiales también ocupaba el demandante rol de productor general.

En 1992, narró el primer partido de beisbol Doble A en el juego inaugural del Estadio Néstor Morales, en una histórica transmisión por la emisora WALO Radio, evento que aún hoy muchos recuerdan como un hito en la crónica deportiva del pueblo.

También fue la voz que nos llenó de emoción en las transmisiones radiales de los juegos de campeonato de los originales Grises de Humacao del baloncesto de la Liga Puertorriqueña. Somos muchos humacaeños los que aun recordamos con un cariño especial esas históricas narraciones en las temporadas ganadoras de 1981, 1991 y 2001.

Además, Sánchez también fue parte de las transmisiones radiales en los dos títulos nacionales de los Grises de Humacao en la Súper Liga Sub-25 de Baloncesto. Su hoja de vida también sumó algunos juegos como narrador en el Baloncesto Superior Nacional con los desaparecidos Caciques de Humacao en la temporada de 2017.

Nesty fue uno de los narradores con más juegos de campeonato trabajados en la historia del deporte en Puerto Rico. Su voz estuvo presente en momentos gloriosos que marcaron generaciones. Además, fue cronista deportivo de la Asociación de Periodistas Deportivos de Puerto Rico, aportando con su pluma al desarrollo de la crónica nacional.

Más allá del micrófono, fue un servidor público ejemplar, laborando por años en el Departamento del Seguro Social, donde ayudó a miles de personas con nobleza, respeto y empatía. Sánchez sentía una profunda gratitud por cada oportunidad que tuvo de servir al pueblo con su voz.

Así lo expresó en una amena conversación sobre su trayectoria con la reconocida periodista Debra Feliciano Ledée en el programa “Salud, Cultura y Algo Más” que se transmite por WALO Radio 1240 AM.

El eterno “Nesty” luchó en muchas ocasiones contra viento y marea junto a otros grandes de los medios regionales, marcando un antes y después en la producción radial deportiva del país. Su estilo, profesionalismo y ética lo convirtieron en un referente obligado.

A las nuevas generaciones de narradores en Puerto Rico, nos toca ahora llevar el micrófono con la misma dignidad que figuras como Nesty Sánchez nos enseñaron.

Teniendo siempre presente que las transmisiones deportivas requieren algo más que entusiasmo; estas exigen un dominio real del arte de usar la voz. Se necesita buena dicción, claridad en el mensaje, y sobre todo, sensibilidad para saber cuándo emocionar y cuándo permitir que el juego hable por sí solo.

Esa fue la escuela de Nesty y de muchos otros baluartes de esa época dorada. Una narración respetuosa, bien medida y profundamente conectada con el oyente, capaz de elevar cada jugada con el tono justo y las palabras precisas.

Un estilo “old school” que no buscaba protagonismo personal, sino servir de puente entre el deporte y el gozo de un pueblo.

Hoy día, escucho narradores/as y transmisiones que me hacen sentir muy orgulloso y optimista de este campo, pero también existen otros proyectos donde es evidente que el nivel de ejecución ha pasado de lo extraordinario a lo ordinario.

Y es que narrar es mucho más que describir jugadas y decir frases; es entender el juego, conocer su historia, sentir la pasión y transmitirla con responsabilidad.

Así lo entendió y lo vivió Nesty Sánchez. Y por eso su legado merece ser aprendido, valorado… y continuado.

Afortunados fuimos los que crecimos con su voz y nos emocionamos con sus relatos. No tengo ninguna duda que Nesty Sánchez vivirá para siempre en cada parque, en cada micrófono y en cada memoria.

Gracias, por tanto, maestro.

Descansa en Paz…