Por Bárbara Solano Quintana / bsolano@elorientalpr.net
(20 de septiembre de 2018)- Con siete años de edad, Jorlaney Oquendo ha alcanzado grandes peldaños como empresaria de “A Cup of Joy”, un quiosco de limonadas en Texas, especialmente desde su aportación filantrópica. Como parte de sus donaciones comunitarias recientes, la niña emprendedora entregó sobre mil dólares en materiales de reconstrucción al centro de envejecientes Ángel de Luz en Las Piedras luego de ver los estragos que ocasionó el huracán María en la zona este de la Isla.
“Vendí un montón de limonadas. Se sintió grandioso”, expresó la niña que lleva el apodo “Joy” a El Oriental. La pequeña propietaria logró acumular $1,200 en ventas de limonadas desde febrero hasta junio de este año, ingresos de los que un 100 por ciento se destinaron en materiales que mejoren la infraestructura de la institución para ancianos.
Desde la limonada tradicional, hasta el sabor de fresa, canela, y una especialidad de limonada tropical que refleja sus raíces puertorriqueñas, Joy realizó un total de siete ventas distintas para poder alcanzar esa importante cantidad de dinero.
“Estaba bien nerviosa porque pensé que no lo iba a poder lograr”, narró la niña sobre su experiencia en las ventas, que, además, le han conseguido el galardón de Mejor Limonada en Houston, Texas por dos años consecutivos.
Joy, quien prepara por su cuenta las limonadas naturales, viajó a Puerto Rico este pasado junio para entregar su cheque simbólico, así como alrededor de 10 pailas de pinturas, brochas, máquinas de presión y capas de imprimación (“primer”), entre otras herramientas que revitalizarán el centro.
La popular bebida de la niña en Houston, inclusive, llegó a generar sobre $100 en tan solo su primera venta con motivo de fondos para Puerto Rico. A un costo de $2 por cada vaso de 16 onzas, Joy vendió cerca de 11 limonadas por cada galón. Sin embargo, la niña también contó con un amplio respaldo de donaciones de ciudadanos en Texas, quienes cooperaron con la causa de la niña por la Isla.
“Cuando uno hace una ayuda, esa ayuda tiene que tener significado para ti”, manifestó por su parte madre de Joy, Sandylane Oquendo, como el consejo que siempre le ofrece a su hija mientras la ayuda a manejar su pequeño negocio.
Adicional a su donación a Puerto Rico, A Cup of Joy también ha otorgado fondos al Hospital del Niño en Texas, en los recaudos de ventas de limonadas que obtuvo en el 2016, y a la biblioteca de su escuela para la compra de libros en el 2017.
A la hora de sentarse a hablar con Joy para decidir el destino del dinero recuperado en ventas de limonadas este año, Sandylane recuenta a El Oriental la respuesta de su hija: “Mamá, yo quiero darle mi dinero a Puerto Rico”.
