El Colegio de Tecnólogos Médicos de Puerto Rico (CTMPR) hace un llamado a la comunidad y las instituciones de salud a estar vigilantes y ser proactivos en la lucha contra el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH). A pesar de que desde el 2020, cada año, se reportan menos casos diagnosticados en la Isla, esto pudiera no estar reflejando la realidad de contagios entre la población, ya que se sospecha que cerca de 1,700 personas (9%) pudieran estar viviendo con el virus sin estar diagnosticadas.
Lamentablemente, la Isla registra una prevalencia del VIH superior a la de muchos estados de la nación americana y existen diversos factores que inciden en esta realidad.
“La prevalencia del VIH en Puerto Rico es el resultado de una combinación de factores sociales, económicos y de comportamiento. Para abordar esta crisis, es necesario un enfoque integral que incluya la educación en salud sexual, la reducción del estigma, el afinar el acceso a servicios de salud y estrategias para abordar la transmisión por el uso drogas y conductas de riesgo”, expresó el licenciado Freddie Vargas, presidente del CTMPR.
Es que, al igual que en los años 90, esta enfermedad continúa siendo un desafío significativo para la salud pública. Desde 1980 al 2022 en la Isla se han reportado 51,411 personas con un diagnóstico de VIH y, durante estos pasados 40 años de epidemia, han fallecido más de 31,000 personas diagnosticadas con VIH.
Cabe mencionar que, para el año 2020, la Oficina de Epidemiología e Investigación del Departamento de Salud (DS), contabilizó unos 309 casos de VIH diagnosticados, en el 2021 aumentó el número a 436, para el 2022 la cifra se redujo a 364 casos adicionales y, en lo que va del 2023, van unas 194 personas diagnosticadas.
Quizás estos números no parecen muy dramáticos en comparación con la década del 2010-2019, cuando los casos de pacientes con VIH registrados fueron entre 826 en el 2010 y 406 en el 2019. No obstante, la realidad es que Isla está viviendo una etapa peligrosa, donde varios factores contribuyen a que este virus se mantenga latente y amenazando la vida de los puertorriqueños.
“La falta de educación en salud sexual y el estigma asociado con el VIH pueden limitar el acceso y la utilización de servicios de prevención y tratamiento del VIH. Este estigma puede disuadir a las personas de hacerse la prueba del VIH, lo que puede conducir a un diagnóstico tardío y a un mayor riesgo de transmisión”, advirtió el licenciado.
De hecho, durante el periodo del 2012 al 2021, las relaciones sexuales sin protección fueron el principal modo de transmisión del VIH en Puerto Rico, ya que aproximadamente 4 de cada 5 personas con un diagnóstico positivo de VIH, reporta el sexo sin protección como el modo de transmisión del virus.
“Entre los hombres, un 64% afirma haber contraído el virus por mantener relaciones con otros hombres, lo que representa el modo de transmisión principal del VIH en caballeros. Mientras, un 89% de las mujeres infectadas, afirman haberse contagiado en un contacto heterosexual (con hombres)”, detalló Vargas.