(18 de junio de 2019)- Justo a tiempo para la llegada del verano, el alcalde de San Lorenzo, José “Joe” Román Abreu, anunció hoy la reapertura del Parque Acuático Piedra Dura en ese municipio luego que el huracán María destruyera sus facilidades en el 2017.
Según informó, el parque, que abrió sus puertas por primera vez en mayo de 2016, ha sido restaurado en su totalidad a un costo aproximado de $800,000 con parte del dinero proveniente de la reclamación hecha a la compañía de seguros y complementado por el fondo general del Ayuntamiento.
La atracción cuenta con una piscina para bañistas con un máximo de cuatro pies de profundidad, una cascada y una chorrera. Mientras, otra piscina simula un lago para realizar actividades acuáticas, como remar en kayak y botes de propulsión a pedal.
Para los que gustan del deporte extremo y la aventura, podrán cruzar las instalaciones, de un lado a otro, al lanzarse de un “zipline” de 90 pies de largo.
“Hemos hecho un esfuerzo extraordinario para poder reabrir sus puertas. La inversión ha sido grande, pero dejarlo cerrado no era una opción”, expresó el mandatario municipal al tiempo que aseguró que el complejo en su operación regular emplea a 34 personas de forma directa y fue creado bajo el Proyecto de Empresas Municipales.
“Es un parque extraordinario, diseñado para el disfrute de toda la familia. Tengo la certeza de que será una empresa exitosa y autosustentable”, sostuvo.
El parque ofrece, además, con una cafetería con comida ligera, refrigerios y un área de mesas con sombrillas para la comodidad de los visitantes. Ubicado en la carretera PR-181 (calle Luis Muñoz Rivera final) en San Lorenzo, el lugar opera durante los meses de verano, de martes a domingo desde las 9:00 de la mañana hasta las 6:00 de la tarde. La entrada general, mientras tanto, tiene un costo de $10.
“Los gobiernos municipales están atravesando un momento muy difícil. Están ante la amenaza de recortes sustanciales que pondrán en alto riesgo la sostenibilidad y existencia de los ayuntamientos. Los recortes y obligaciones que pretenden imponerle a los municipios afectarán adversamente su operación y limitarán el reclutamiento de personal necesario para el ofrecimiento de servicios a la comunidad… Es por ello que seguiré trabajando en el desarrollo de este tipo de proyectos”, manifestó Román Abreu.
