(21 de noviembre de 2018)-Revolotean por todo el hábitat, algunas en busca de sol, otras con el instinto de protegerse de la lluvia bajo las hojas. El vivero está verde y los estudiantes y el personal de la escuela Segunda Unidad Clara Maldonado de Aramburu en el pueblo de Juncos están más que contentos.
El pasado viernes, la comunidad escolar, así como un grupo de colaboradores celebraron que a un año y dos meses del paso del huracán María ya pudieron rehabilitar su mariposario y con la apertura, continuar con el proyecto, único en la Isla.
Desde hace 10 años, en el aula, la profesora Janelise Aldea Delgado, maestra de ciencias, es la propulsora del espacio que se ha convertido en un centro de aprendizaje tanto para estudiantes como para visitantes, sobre las mariposas, su metamorfosis e importancia para el medio ambiente.
“Aquí lo que trabajan son los estudiantes, en el vivero y en el mariposario. Esto es para mí una ilusión y un respirar. Es la creación de Dios vista aquí, es ver cómo de un huevito sale una oruga y se convierte en crisálida y de ella sale un insecto con sus alas y escamas”, describió Aldea Delgado.
En el área, que ubica en el patio posterior del plantel, habitan especies como la mariposa zebra, agrauli y monarca. Actualmente, cuentan con un estimado de 25 que eventualmente serán liberadas en lo que la maestra describe como “una bandada de amor”. El propósito del mariposario es la reproducción de la especie.
Su pasión por los lepidópteros surgió con la participación de su hija Yamilka Pabellón en una Feria Científica. Para dar forma al proyecto Alianza Verde, la educadora tomó un curso formal en el Instituto Nacional de Biodiversidad (InBio) en Costa Rica.
Por su parte, la directora escolar Tere de Lourdes Hernández describió que al día siguiente del huracán encontró la destrucción del ecosistema, incluidas sus plantas hospederas. Luego de un año, ya puede celebrar que el mariposario está listo para aprender.
“Los niños vienen desde kínder, ellos hacen gráficas contando los huevitos y las orugas. Han hecho cuentos y dibujos sobre el ciclo de vida de la mariposa. Este es el laboratorio ideal porque cubre todas las destrezas”, comentó la directora.
El laboratorio pudo recuperarse gracias al apoyo de la comunidad escolar y grandemente por la aportación de participantes de la iglesia Mar Azul, quienes fueron reconocidos en el plantel, la tarde de la reapertura.
“Encontrarlos fue una de las casualidades más hermosas de nuestras vidas. Para nosotros ha sido espectacular ser parte de esta comunidad, ver a los estudiantes y la comunidad, esto es un equipo. Gracias por amarnos y recibirnos”, comentó Ana Santiago, participante de la congregación.
Por su parte, Yasmanis Herrera indicó que, la restauración se logró mediante un esfuerzo en equipo.
“Lo más hermoso es que lo hicimos juntos en colaboración con muchas otras personas, padres, estudiantes. Es hermoso lo que se puede construir cuando trabajamos juntos”, comentó el joven.
En 2009 la profesora Aldea Delgado recibió el Premio Amgen a la Excelencia en la Enseñanza por la iniciativa.
Proceso de la mariposa Monarca:
