La senadora Keren Riquelme hizo un llamado a las escuelas de derecho en Puerto Rico, así como a la Asociación de Abogados y el Colegio de Abogados, a que proveen asesoría voluntaria a los adultos mayores, incluyendo sus familiares cercanos, sobre las alternativas disponibles para no perder su residencia ante la posible avalancha de ejecuciones hipotecarias asociadas al llamado ‘reverse mortgage’.
“Hace unos días que hemos venido observando un dramático aumento en la cantidad de casos de adultos mayores que enfrentan ejecución de préstamos asociados a las hipotecas reversas, o el llamado ‘reverse mortgage’. No podemos quedarnos de brazos cruzados. Muchas de estas ejecuciones son por tecnicismos legales, y en muchos casos la persona se queda sin techo. Urge una asesoría legal, por eso hacemos este llamado a nuestras escuelas de derecho, quienes siempre han estado ahí para la gente, a ofrecer los servicios voluntarios en las comunidades”, dijo Riquelme.
Las hipotecas en reversa son préstamos garantizados con la propiedad residencial de la persona que lo suscribe. Se entiende que cuando el dueño del hogar fallezca, sus herederos, entonces, tendrán la primera opción en comprar la vivienda. También pueden comprar la hipoteca si se muda o vende la propiedad en el mercado regular.
Entre los requisitos para evitar una ejecución antes de las antes mencionadas condiciones, se encuentra estar al día con los pagos de contribución al Centro de Recaudación de Ingresos Municipales (CRIM), mantener vigente la póliza de seguro de la vivienda, así como proveer mantenimiento regular a la propiedad, entre otros.
“Cuando se mercadean estos productos agresivamente hace poco más de una década atrás, muchas instituciones también propusieron quedarse con parte del préstamo de la ‘reverse’ con el fin de pagar la póliza de seguro por un periodo. Si luego la persona residente, por la razón que sea, muchas veces desconocimiento, no paga, es blanco de ejecución. Por eso es imprescindible la orientación legal. De igual forma sucede con las otras condiciones”, sostuvo Riquelme.
“Estaremos enviando cartas a los decanos de las escuelas de derecho de la Universidad de Puerto Rico, Universidad Interamericana y la Pontificia Universidad Católica para conversar sobre la estructura que desarrollaremos para proveer una herramienta de asesoría legal a estos adultos mayores, quienes construyeron el Puerto Rico moderno. De igual forma, haremos lo propio con la Asociación y el Colegio de Abogados; este es un asunto de todos”, añadió la legisladora.
La Senadora del Partido Nuevo Progresista expresó que colocará los recursos de su oficina legislativa para asistir en este esfuerzo.