Mensaje con conciencia a través del “trash metal”

0
509
Foto por Yeidy Agneris Vega Alicea / De izquierda a derecha: Fernando Rivera Ortiz, Gonzalo Ortiz Rosario, Bernardo “Bernie” Santos Collazo y Eduardo Acevedo Menéndez, integrantes de Calamity.

Por Yeidy Agneris Vega Alicea / yvega@elorientalpr.net / Twitter @YeidyAgneris

(29 de julio de 2019)- Influenciados por algunas de las bandas inmortales del rock pesado y sobre todo, conectados por una amistad que los une desde sus años escolares, los integrantes de la banda Calamity están listos para ser los exponentes del estilo “trash metal” en la isla, con una actitud y enfoque alejado de los estereotipos y con un alto nivel de conciencia social.

Sus cuatro integrantes, Eduardo Acevedo Menéndez, baterista, el bajista, Fernando Rivera Ortiz, el vocalista Bernardo “Bernie” Santos Collazo y el guitarrista Gonzalo Ortiz Rosario, comparten el sueño de llevar su música tan lejos como sea posible, y de igual manera, desean abrir un espacio a ese género en la isla, porque saben que escondidos en sus nichos hay miles de rockeros que anhelan escuchar un buen metal en “el patio”, como se llama a la escena de las bandas locales.

Tal como comenzaron otras, la banda inició tocando temas de otros artistas que influenciaron sus gustos y agudizaron su estilo. Sin embargo, en los ensayos de marquesina se dieron cuenta de su potencial.

“Una vez comenzamos a tocar los ‘covers’ de Metallica y vimos que teníamos la energía necesaria para hacerlo y la habilidad empezamos a crear música original. Seguimos teniendo influencia de otras bandas y otros géneros y creamos que nuestra música siempre tenga ese balance entre metal con ritmos caribeños o melodías tipo jazz o música clásica”, explicó Ortiz Rosario de 25 años, natural del pueblo de Caguas.

Tres de sus músicos, excepto el percusionista, que los conoció en la escuela superior, son amigos desde los grados elementales cuando estudiaban Escuela Montessori Niños Uniendo al Mundo en Caguas.

Como parte del estilo de su género, uno de los principales retos lo tiene el vocalista. En el caso de “Bernie” el sonido ronco y “oscuro” lo descubrió en un momento de “crisis” cuando el pasado cantante salió de la banda y al también guitarrista le tocó asumir el rol, talento que aún perfecciona y que le da una importante identidad a sus canciones.

“Todavía la estoy descubriendo (la voz), pero en cuestión de gritar, me salió automáticamente. No podía cantar afinado, mi voz no era melodiosa, ahora lo estoy comenzado a desarrollar. Con el tiempo entre todos fuimos puliendo el estilo. Muchas veces quedándome ronco, hasta ahora que lo que hago es gritar, pero estoy haciendo una melodía con la voz”, explicó Santos Collazo.

Por su parte, Rivera Ortiz, bajista de Calamity, explicó que cuando estudiaban en la escuela superior vio que para sus amigos la música era algo serio, compromiso por el que decidió tomar clases de bajo en la Escuela Libre de Música, también en Caguas para poder integrarse.

Al tocar el instrumento, según comentó, siempre se reta a crear un sonido que se distinga, especialmente de los tonos agudos de las guitarras.

“Esa es mi mentalidad siempre, que el bajo sobresalga y que tenga sus momentos de melodía, que suene lindo… Cuando vi que faltaba un bajista les dije ‘muchachos, voy a coger clases’. Cogí las clases para entonces ese espacio poder cubrirlo. Como estábamos en la escuela juntos tuve la iniciativa de aprender”, añadió Rivera Ortiz.

La banda estrenó el pasado mayo su más reciente álbum titulado “Kairos”, una producción que acorde con la misión de la agrupación hace un llamado a la conciencia.

“Nosotros somos bien genuinos cuando estamos componiendo la letra y la música, escribimos sobre cosas que nos pasan a nosotros en nuestras vidas, pero siempre le buscamos lo positivo a lo que está sucediendo”, comentó el percusionista, quien como parte de esa originalidad combina en su estilo ritmos caribeños e incluso del jazz, géneros que estudió en el Conservatorio de Música de Puerto Rico (CMPR).
Sobre el estilo, el cantante abundó que, de alguna manera su lírica y sonido contrastan con la “calamidad” a la que hace referencia el nombre de la banda.

“Lo que está por ahí sonando es todo bien oscuro y lo que refleja al principio es negatividad, agresividad o violencia… Ahí viene un poco lo que es la misión de nosotros, porque la mayoría de los rockeros son gente que están pendientes a sus problemas, que tienen problemas en sus familias, que están pasando por momentos difíciles. Entonces, cuando llegan a Calamity el propósito de nosotros es hacerlos sentir bien, que se sientan mejor”, añadió.

El grupo se propone continuar de gira, tanto en la Isla como fuera de ella, transmitiendo conciencia con sus líricas y composiciones tanto en inglés como en español.