Para los ciudadanos de la zona oriental de Puerto Rico ha sido complicado y difícil el proceso de vacunación contra el COVID-19 que llevan a cabo el Departamento de Salud (DS) y la Guardia Nacional de Puerto Rico (GNPR). Personas han tenido que prácticamente pasar una noche en su vehículo esperando el amanecer para poder opcional un turno para vacunarse debido a que los residentes de Humacao y pueblos vecinos tienen que llegar hasta el Centro de Bellas Artes de Caguas, que es una de las seis localidades preparadas para el proceso que les queda más cerca.
El alcalde de Humacao, Reinaldo “Rey” Vargas Rodríguez, había anunciado que el Coliseo Marcelo Trujillo Panisse se convertiría en un centro de vacunación local, a partir del 18 de enero pasado, pero hasta el cierre de esta edición no se vislumbra una pronta apertura de ese centro. “Yo llamo todos los días al general Reyes y al capitán Cruz que está allá en Caguas. El problema es el suministro de vacunas a Puerto Rico, según me informan. Una vez yo esté claro de que llegaron más vacunas, tiene que abrirse este centro de vacunación aquí en Humacao”, demandó.
Por su parte, el alcalde de Yabucoa, Rafael Surillo Ruiz, catalogó como muy malo la falta de un centro de vacunación en la zona. “Yo entiendo que el manejo ha sido injusto. Desde el principio he estado indicando en reuniones que hemos tenido en la Asociación de Alcaldes y con el secretario de salud y la subsecretaria que es la que ha estado a cargo de este asunto, de que nuestro municipio tiene la disposición de cooperar y ayudar en este proceso”, manifestó el alcalde en una entrevista radial.
El alcalde explicó que tiene a su disposición un grupo médico, así como clínicas 330 y farmacias, que están en la disposición de ayudar en el proceso de vacunación de los encamados y la población mayor de 65 años. Dijo que, aunque reconoce que hay una escasez de vacunas en la isla, siente que su pueblo ha sido discriminado. Alegó que solo un 3 o 4 por ciento de la población yabucoeña ha recibido la primera dosis de la vacuna.
“Nosotros tenemos elaborado un plan completo para suministrar la vacuna en nuestro pueblo, lo que necesitamos es que nos hagan llegar algunas vacunas. Es injusto que una persona mayor de 65 años, o un encamado, tenga que ser transportado a Caguas para recibir su vacuna”, declaró.
Prioridad para mayores de 65 años
Mientras, el designado secretario del Departamento de Salud, Carlos Mellado, firmó una orden administrativa para vacunar contra el COVID-19 exclusivamente a personas de 65 años o más por las próximas cuatro semanas, excluyendo los centros identificados para vacunar a personal del sistema educativo del país.
“Vamos a garantizar que las vacunas lleguen a donde realmente tienen que llegar acorde con la fase actual. Nuestros adultos mayores son nuestra prioridad. Ellos representan la población más vulnerable y es nuestro deber garantizar la vacuna para evitar contagios que pueden prevenirse. No vamos a tolerar que nadie brinque o adelante la fase que le corresponde. Ante los cambios que dispone la nueva orden administrativa seguiremos vigilantes para que la directriz no se viole bajo ningún concepto”, sostuvo el funcionario en un comunicado de prensa.
El Gobierno de Puerto Rico proyecta alcanzar 178 hogares de ancianos durante esta fase de la vacunación. Esta etapa llega hasta marzo. En concreto, serían 75 centros en el norte de la isla, 37 en el este, 36 en el sur y 30 en el oeste, según un comunicado del Departamento de Salud.
El proceso de vacunación contra el COVID-19 en Puerto Rico comenzó en diciembre. El Departamento de Salud dice que hasta ahora se han distribuido 339,000 vacunas en toda la isla.
En la primera etapa, se comenzó a vacunar a los profesionales de la salud, así como a otros trabajadores de los hospitales y de emergencias. También a quienes trabajan y viven en albergues, asilos y otros centros de cuidado prolongado. La etapa B de esa primera fase incluye a policías, trabajadores de emergencia, empleados del Departamento de Educación y otros considerados esenciales. La etapa C agrega a quienes padecen enfermedades crónicas como la diabetes o condiciones cardíacas. También a individuos con problemas respiratorios, pacientes renales y aquellos que están inmunocomprometidos.
Según el Departamento de Salud, unas 52,000 personas mayores se han vacunado, hasta la fecha, en Puerto Rico. Esa población fluctúa entre los 600,000 a 800,000 personas. Se espera que los seis centros de vacunación reciban a las personas citadas de forma aleatoria y según la edad a través de la plataforma para turnos del Departamento de Salud. Los citados necesitan una identificación con foto, pasaporte o certificado de nacimiento.
“La prioridad es clara al igual que la instrucción que impartí. Todos los proveedores de salud que reciben vacunas deben estar vacunando únicamente a la población mayor de 65 años”, señaló Mellado por comunicado. “Necesitamos que nos ayuden en este proceso, que conlleva tiempo por la cantidad de vacunas disponibles y la complejidad de esta población. Que no le quepa duda a nadie de que estamos buscando todas las herramientas posibles para facilitar el proceso”, agregó.
La GNPR tiene estaciones en el Centro de Bellas Artes, en Caguas; Palacio de Recreación y Deportes, en Mayagüez; Coliseo Rubén Rodríguez, en Bayamón; Coliseo Petaca Iguina, en Arecibo; Complejo Ferial, en Ponce; y el Coliseo Pedrín Zorilla, en San Juan. Los centros operarán de lunes a viernes de 8:00 a.m. a 4:00 p.m.
Salud informó que utilizará la base de datos del programa federal para citas. La agencia notificará posteriormente qué pasos seguir de no ser contactado en las próximas cuatro semanas.