“El gobierno solo no es posible. El gobierno tiene un rol de prestar unos servicios… pero nos toca a nosotros ser más creativos, ser más innovadores y gestar ese compromiso con la comunidad”.
Con esa expresión el presidente del Programa de Educación Comunal de Entrega y Servicio (Peces), José Oquendo, aseguró que el crecimiento de las organizaciones comunitarias y la creación de más entidades sin fines de lucro será esencial dentro de los próximos cinco años para atender cualquier emergencia futura en la isla.
Oquendo, quien dirige hace 15 años la institución con sede en el barrio Punta Santiago, en Humacao, señaló que las organizaciones comunitarias evidenciaron ser la primera línea de respuesta durante las emergencias que han ocurrido desde 2017, como el huracán María, los terremotos del pasado enero y la actual pandemia por el COVID-19.
En entrevista con El Oriental, el líder realizó un llamado al gobierno para que continúe las ayudas a estas entidades que se sustentan con fondos estatales y federales, así como donaciones de individuos y corporaciones privadas.
“Creo que el gobierno no tiene de otra. El gobierno sabe cuál es la agilidad de las organizaciones sin fines de lucro, el sector de base comunitaria y las organizaciones de base de fe… La mayoría de las organizaciones que atendieron estas situaciones de emergencia han hecho un trabajo encomiable”, destacó Oquendo.
“Deberían ser apoyadas y auspiciadas dramáticamente para que siga creciendo el sector”, manifestó.
El presidente afirmó que, en el “futuro inmediato”, prevé un aumento significativo de organizaciones dedicadas al servicio comunitario alrededor de la isla. En Peces, que el pasado abril cumplió 35 años de aniversario de fundación, indicó que ambiciona brindar servicios a nivel isla e, inclusive, para la población puertorriqueña en la diáspora.
“Nos encantaría ver ese crecimiento enorme de las organizaciones. Peces aspira a ser una organización, en términos de los próximos cinco años, que ya tiene un nivel de crecimiento amplio y pueda estar dando sus servicios de manera más sostenida y marcada a nivel isla; también exportando, de alguna manera, sus servicios”, adelantó Oquendo.
Servicio trascendental en la zona este
En más de tres décadas de gestión comunitaria, Peces se ha destinado a fomentar el desarrollo social, económico y educativo en cientos de comunidades en la región este. Sin embargo, Oquendo aseveró que en los últimos tres años, particularmente, han asumido la mayor responsabilidad de atender las necesidades de la población.
Desde el paso del huracán María, cuyo centro entró por Yabucoa el 20 de septiembre de 2017, la entidad ha provisto más de $4.5 millones en distribución de apoyo a los ciudadanos de la zona este, de acuerdo con el presidente.
Dentro de esa suma de dinero se encuentra la inversión en 250,000 libras de alimentos repartidas a los ciudadanos durante la emergencia posterior al ciclón y los materiales requeridos para reconstruir sobre 250 hogares en el área este.
“Atendimos prácticamente toda la región este y sureste con proyectos significativos de rehabilitación de viviendas… Distribuimos unas cantidades extraordinarias de alimentos. Estamos hablando de un impacto dramático, en términos de lo que hicimos en la (emergencia) con respecto al huracán”, sostuvo.
A pesar de los retos de continuar sus operaciones a distancia, Oquendo mencionó que Peces ha ofrecido más de 44,300 servicios virtuales a los ciudadanos durante la pandemia por COVID-19. Entre ellos, servicios psicológicos, apoyo emocional y manejo de crisis.
Además, la organización ha entregado alimentos a 4,301 familias, lo que representa un aproximado de 12,333 personas en 14 pueblos de la zona este.
“Han sido muchos los efectos que ha tenido el impacto de la pandemia, que nos han movido a ser bien creativos y tratar de llegar cada día más a atender las necesidades de nuestros ciudadanos”, dijo el líder.
Como parte de su apoyo al desarrollo económico y a los emprendedores, la entidad becó a 20 estudiantes egresados de la Escuela Superior Alternativa de Peces para el desarrollo de sus negocios. Asimismo, han reforzado las ayudas a los pescadores con vales de alimentos y capacitación virtual para que puedan mercadear sus productos en medio de la emergencia.
Próximamente, según Oquendo, el Centro de Sostenibilidad de Punta Santiago estrenará un centro de atención de llamadas (“call center”), donde los miembros de Peces podrán canalizar las necesidades de los adultos mayores. Al momento, la fundación ha asistido a 155 envejecientes desde el inicio de la pandemia.
“Peces es una entidad que, por el nivel de reconocimiento que tiene, puede desarrollar iniciativas y propuestas que se traducen en servicio. Eso es lo que hacemos: tratar de que las personas nos digan cuál es su necesidad y, una vez tenemos esa necesidad identificada, buscamos los recursos y los apoyamos”, resaltó el presidente.